La mansión fue fundada por don Garcí Manuel de Carbajal en 1540, quien también fundó la ciudad de Arequipa en representación de la corona española. La mansión se encuentra a unos 20 km de la Plaza de Armas de Arequipa, en la zona conocida como Huasacache.
La mansión es un ejemplo único de construcción civil de la época colonial, con bóvedas y contrafuertes de sillar, una blanca piedra labrada de lava volcánica extraída de las canteras de la región. Su arquitectura es una invitación a conocer cómo se vivía en la época colonial.
La mansión es un lugar que abraza a la comunidad que la rodea, y es también un punto de encuentro donde se celebran eventos sociales inmersos en una atmósfera llena de historia y tradición. Se puede disfrutar de almuerzos familiares bajo un cielo azul infinito y a la sombra de molles y vilcos.
La mansión es un monumento vivo que hoy mantiene sus puertas abiertas para lugareños y visitantes, y es un lugar que nos transporta a aquellos tiempos en que la campiña, el yaraví y los caballos eran parte del día a día de la Arequipa.
En la mansión se pueden vivir experiencias únicas, como disfrutar de la naturaleza que la rodea, escuchar el mágico sonido de las hojas de los árboles que bordean la alameda, y celebrar eventos sociales en un ambiente lleno de historia y tradición.